Es uno de los tipos más queridos de la televisión. La voz y el rostro de José Luis Gil son como de la familia. Doblador de incontables personajes ilustres y protagonista de series tan aclamadas como Aquí no hay quien viva o La que se avecina, la popularidad del intérprete se ha multiplicado a lo largo de las últimas dos décadas. De ahí la enorme preocupación por su salud.
José Luis Gil sufría un ictus isquémico agudo el pasado 4 de noviembre. Una situación grave por la que ha estado ingresado 22 días. El comunicado oficial de su familia anunciaba que el 26 de noviembre abandonaba el hospital y regresaba a su domicilio. Un momento en el que arrancaba el difícil y lento proceso para su completa recuperación. Una rehabilitación que se está llevando en la más estricta intimidad, y que podría ser mucho más complicada de lo que imaginábamos.
A lo largo de estas semanas, entre los compañeros de reparto de La que se avecina siempre se había manifestado bastante preocupación, pero imperaba el silencio. Así, las recientes palabras de Cristina Castaño, una de las grandes estrellas de la serie durante muchas temporadas y amiga de José Luis Gil, han provocado que la preocupación se multiplique.
“Está yendo poco a poco. Está toda la familia con él acompañándole y dándole toda la fuerza. Deseamos siempre que se mejore pronto y poder disfrutarle. Su familia está trabajando muchísimo para que se recupere, que están muy unidos. Que le haya pasado esto es triste y doloroso, pero bueno, está arropado por una gran familia. Todos están con él, acompañándole”. Con estas palabras, Cristina Castaño dejaba claro que la situación a la que se enfrenta José Luis Gil es mucho más compleja de lo que deseábamos.