El abogado Matt Murdock es ciego a causa de un residuo radioactivo, pero sus otros cuatro sentidos están especialmente agudizados. De día, Murdock representa a los oprimidos. Por la noche, es Daredevil, un héroe enmascarado que vigila las oscuras calles de la ciudad y lucha contra toda clase de injusticias. Así, allá por el año 2003, se presentaba en los cines de todo el mundo la película de Daredevil. El famoso personaje de las viñetas de Marvel daba su salto al cine rodeado de enormes expectativas, pero todo resultaba un desastre.
Efectivamente, la película de Daredevil es recordada como una infamia por parte de millones de fans. Cierto es que dista mucho de ser una maravilla y que poco tiene que ver con el superhéroe de los cómics. Sin embargo, conviene tener en cuenta que era una época en la que el cine de superhéroes no gozaba de muy buena salud. Además, se intentaba llegar al gran público a base de ajustarse más bien poco a las viñetas, ofreciéndonos personajes bastante diferentes a lo que las cabeceras de cómics nos tenían acostumbrados.
Para todos, hablar de la Daredevil de Ben Affleck es hablar de un desastre en toda regla. Pero… ¿también a nivel económico? La realidad es que recauda 179,1 millones de dólares allá por el año 2003. Teniendo en cuenta que la película se dejaba solo en producción 80 millones, no se puede hablar de un éxito precisamente, pero tampoco de un fracaso en toda regla, ya que la cinta incluso arrojaba ciertos beneficios. Eso sí, rosa del emblemático superhéroe quedarían traumatizados para siempre.