Puede ser uno de los rodajes más tormentosos de los últimos años. Cuando el proyecto de No te preocupes, querida empezó a andar, todos estamos tremendamente entusiasmados ante la nueva cinta como directora de Olivia Wilde tras la sensacional Super empollonas. Sin embargo, los últimos meses se han convertido en un torbellino.
Shia Labeouf despedido de la película (pese a que lo niegue), la relación sentimental de la directora Olivia Wilde con el protagonista Harry Styles, el divorcio de la directora y Jason Sudeikis… Sin embargo, uno de los episodios más salvajes de todos se producía con una discusión a gritos en el set de rodaje entre Olivia Wilde y Florence Pugh.
Tal y como se ha sabido, Florence Pugh se negaba a hacer promoción de la cinta, pero esto obedecía a un acuerdo con Warner Bros. para evitar cualquier polémica adicional. Y es que la fricción entre directora y protagonista durante el rodaje alcanzó niveles descomunales. Al parecer, la relación sentimental entre Olivia Wilde y Harry Styles provocaba que la directora y el intérprete se ausentasen en demasiadas ocasiones del set sin dar explicaciones. Algo que molestaba de sobremanera a Florence Pugh. Para colmo, la actriz es amiga de Jason Sudeikis, el entonces marido de Olivia Wilde. Y Pugh estaba asistiendo a una infidelidad que la cabreaba de sobremanera. Así hasta estallar todo en una enorme discusión entre directora y actriz, que destruía la relación entre ambas. Un cuadro el rodaje de No te preocupes, querida.