Lo dijo hace casi tres décadas y piensa llevarlo a las últimas consecuencias. Quentin Tarantino anunció en su día que solo firmaría 10 películas en su vida. Uno de los mejores y más influyentes directores del planeta siempre lo tuvo claro y no piensa romper su palabra. Al menos eso es lo que ha dejado claro en la reciente gala de los Globos de Oro.
Tras llevarse tres galardones a casa gracias a la sensacional Érase una vez en… Hollywood (Mejor película de comedia, Mejor guion y Mejor actor secundario con Brad Pitt), no eran pocos los que se interesaban por los planes de futuro del director. Una cuestión que encontraba la respuesta que el bueno de Quentin lleva dando desde hace mucho tiempo: “Mi décima película será la última. Me gusta la idea de una filmografía de 10 películas en las que haber pasado 30 años dando todo lo que tengo. Esa es la forma clásica de salir que se hacía en el viejo Vodevil”
Efectivamente, siempre habíamos visto esa potencial retirada como un momento lejano, pero ahora las cosas son distintas. Considerando Kill Bill como una única película, lo cierto es que ya son ocho las películas que ha firmado en su carrera, por lo que la despedida de este auténtico fenómeno estaría cerca.
Atención, spoiler: no lo cumplirá. Este es otro como Soderbergh que también dijo algo así en su día. Mucho lirili… pero se necesitan billetes.
Aunque para lo que saca últimamente (hostias, lo que ha dicho, QUE LO MATEN). Perdón, rectifico: para lo que saca últimamente, sí, que se vaya. Entre esa cosa llamada Django Desencadenado y su final desatado e inverosímil, Los Odiosos Ocho y ese final desatado e inverosímil, Malditos Bastardos / la de Hollywood ( Eh, SON LA MISMA PELÍCULA: trata de “vamos a cambiar la historia y que los hechos sean los que salen de la mente de Tarantino” ) y sus finales exagerados y desatados (¿pero qué coño le pasa a Tarantino últimamente en sus últimos actos en las películas).
O sea, que se vaya. Porque el señor que hizo Pulp Fiction, Jackie Brown y Kill Bill nunca volvió.
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