Puede que resulte sorprendente semejante afirmación cuando todavía estamos en noviembre. Y es que valoraciones así son más propias de los últimos días del año. Lo que pasa es que mucho tendría que torcerse las cosas y la sorpresa resultaría de épicas proporciones si de aquí al último día de 2022 nos encontramos con una serie peor que la de Resident Evil.
Nos las prometíamos muy felices cuando en Netflix decidieron apostar por recuperar la famosa saga zombi de videojuegos para la pequeña pantalla con una serie llamada a hacer las delicias de propios y extraños. Poco podíamos imaginar quién así vamos a encontrar semejante desaguisado. Nada funcionaba en un auténtico desastre en el que la historia generaba indiferencia, el terror no aparecía por ninguna parte y el único suspense era si en Netflix iban a tener valor a continuar con una segunda temporada.
Como era de esperar, en la plataforma de streaming no se pensaban demasiado si era procedente darle una nueva oportunidad. Netflix octava por cancelar la serie de Resident Evil conscientes de que les había salido un patinazo memorable. Así, lo que prometían ser varios años rodeados de zombies por cortesía de la Corporación Umbrella terminaba en un puñado de capítulos realmente olvidables.