El consumo de series y los hábitos de los espectadores han cambiado de forma radical. A lo largo de los últimos años la entrada en nuestras vidas de las plataformas de streaming ha hecho que las cosas sean diferentes. Nos hemos acostumbrado a poder consumir un capítulo 3 otra de nuestras series favoritas sin tener que esperar ni un minuto entre uno y otro.
Curiosamente, en muchos proyectos la dilatación temporal se ha convertido en la diferencia entre el fracaso y el éxito. La casa de papel o You no funcionaban demasiado bien en sus emisiones hasta que Netflix las cogía. Por el perfil de historia, los espectadores hacían de ellas éxitos incomparables al poder ver un episodio tras otro. Precisamente eso es lo que está ocurriendo con Café con aroma de mujer, pero en el sentido contrario.
La exitosa telenovela colombiana arrasaba en Netflix, logrando un éxito arrollador. Muchísimos meses como una de las ficciones más vistas de la plataforma de streaming llevaban a Telecinco apostar por la serie para sus tardes. Sin embargo, teniendo que esperar un día entre capítulos, los espectadores decidían darle la espalda. Para sorpresa de los responsables de la cadena, la audiencia se iba desmoronando rápidamente, los obligaba a modificar sus horarios de emisión de Café con aroma de mujer. De hecho, parece cuestión de días que la eliminen de su parrilla. Este mundo nuevo es cada vez más difícil de comprender.