Es el momento de pararse a reflexionar sobre lo que está por venir. Hace casi una década, el universo cinematográfico de DC arrancaba de la mano de Zack Snyder y de El Hombre de Acero. Comenzaba así el intento de la compañía por plantarle cara al arrollador éxito de Marvel. Desde entonces, más sombras que luces en un macroproyecto que nunca he terminado de volar todo lo alto que cabía esperar.
Ahora es el momento de mirar hacia el futuro. Con un universo DC adulto en el que brillan el Batman de Robert Pattinson y el Joker de Joaquin Phoenix, en la compañía han decidido que toca impulsar el Universo DC. Para ello se han puesto en manos de uno de los tipos con más talento de la industria: James Gunn. Tras una primera parada en El Escuadrón Suicida, el bueno de Gunn y Peter Safran eran nombrados copresidentes y codirectores ejecutivos de DC Studios. Dos talentos inmensos para reflotarlo todo.
Tal y como han afirmado ya, tienen entre manos un plan que era de 8 a 10 años y en el que se buscará contar una única historia alrededor de la que irán girando las múltiples películas que llegarán a nuestros cines. La idea es construir desde cero, si bien aprovechando el tirón de figuras como Henry Cavill, Gal Gadot, Dwayne Johnson o Jason Momoa. Esperemos que esta vez las cosas les salgan bien.