Los que pensaban qué James Cameron se le iba a pegar con su regreso a Pandora no podían estar más equivocados. El pasado 16 de diciembre llegaba a las salas de cine de todo el mundo Avatar: El sentido del agua. La secuela de la película más taquillera de la historia del cine se había hecho de rogar durante 13 años, pero la espera merecía la pena. Y es que el público abarrotaba los cines por doquier, lo que está provocando ya que se empieza a hablar de la posibilidad de que pudiese acercarse a los datos de Avatar.
A día de hoy, Avatar: El sentido del agua acumula ya 1.400 millones de dólares los cines de todo el planeta. Una cifra descomunal, sobre todo si tenemos en cuenta la comparación de su recaudación durante el fin de semana de Noche Buena y el de Noche Vieja. En ambos casos, la cinta lograba 63,4 millones de dólares, dejando claro que, lejos de marcarse caídas pronunciadas, Avatar: El sentido del agua se mantiene de una forma asombrosa. No se veía nada igual desde la primera entrega. Por aquel entonces, la clave era la de mantener cifras parecidas un día tras otro. Algo que empieza a apreciarse ya en esta segunda película.
Todavía es pronto para aventurarse a marcar un techo para Avatar: El sentido del agua, pero hablar de una recaudación final cercana a los 2.500 millones de dólares parece bastante razonable. De esta forma, se convertiría en la tercera película más taquillera de todos los tiempos y en un éxito sin paliativos. Tampoco conviene descartar cotas mayores a la vista de la escasa competencia de las próximas semanas. Veremos.