Este tipo es bastante rarete. Como todos sabemos, las estrellas suelen sorprendernos con excentricidades de lo más llamativas, pero la verdad es que Nicolas Cage se lleva la palma en estas cosas…
El ganador del Oscar lleva años firmando películas horrendas que se ve obligado a realizar para pagar sus cuantiosas deudas y sus múltiples extravagancias. El bueno de Nic se ha convertido en una especia de icono de ese extraño umbral de cine que no llega a ser serie B, pero que tampoco el demasiado aceptable como cine común. Una complicada situación a la que ha llegado por hacer cosas como esta.
Muchas veces habíamos oído hablar de la tumba que se había construido el actor. Lo cierto es que Nicolas Cage adquiría en 2010 una importante parcela en un cementerio en Nueva Orleans con más de doscientos años de historia. Allí, en el Saint Luis, Nicolas Cage ordenaba construir la corona de su interminable lista de rarezas. Efectivamente, hablamos de su pirámide funeraria. Con tres metros de altura y un coste que preferimos no saber, aquí te presentamos el mausoleo que el actor ordenaba construirse. Menudo figura…