Venimos de celebrar los cumpleaños de Clint Eastwood (90) y Morgan Freeman (83), por lo que la cita se antojaba obligada. Efectivamente, hoy vamos a pasearnos por una de las mejores cintas jamás filmadas. Es noche de Million Dollar Baby.
Después de haber entrenado y representado a los mejores púgiles, Frankie Dunn (Eastwood) regenta un gimnasio con la ayuda de Scrap (Freeman), un ex-boxeador que es además su único amigo. Frankie es un hombre solitario y adusto que se refugia desde hace años en la religión buscando una redención que no llega. Un día, entra en su gimnasio Maggie Fitzgerald (Hilary Swank), una voluntariosa chica que quiere boxear y que está dispuesta a luchar lo que sea para conseguirlo. Pero lo que más desea y necesita es que alguien crea en ella. Frankie la rechaza alegando que él no entrena chicas y que, además, es demasiado mayor. Pero Maggie no se rinde y se machaca cada día en el gimnasio, con el único apoyo de Scrap. Finalmente, convencido de la inquebrantable determinación de Maggie, Frankie decide entrenarla.
Si la historia de Maggie Fitzgelard (Hilary Swank) consigue enternecer a Clint Eastwood, imaginaos lo que puede hacer con nosotros. Pocas veces el cine voló tan alto como en Million Dollar Baby. Disponible en Amazon Prime Video.