Uno de los grandes rumores no confirmados de Hollywood siempre fue la teoría de que Judy Lewis, la hija de Loretta Young era fruto de una aventura que la actriz había tenido con Clark Gable. La confirmación de ello no resulta muy sorprendente, la verdad. Pero lo que nadie se esperaba era escuchar la cruel y dramática historia que se escondía tras esto.
Corría el año 1935. Loretta Young era una de las actrices más prometedoras de la industria. No era de extrañar que su nombre fuese requerido para protagonizar La llamada de la Selva junto al mismísimo Clark Gable. El actor caería prendado de la belleza de Young desde un primer momento. el flirteo entre ambos era evidente. El problema es que Loretta Young era una buena chica católica y, para colmo, Gable estaba casado. La intérprete se dedicaba a apartar de forma constante a un Clark Gable que bebía los vientos por la actriz. El actor, poco acostumbrado a no triunfar, inestable, adicto al sexo y amigo del alcohol decidía cobrarse su pieza de la manera más triste que se pueda imaginar. Durante el viaje en tren de regreso a Los Ángeles, Gable irrumpía en el compartimento privado de Young y la violaba. Un mes después, la actriz se daba cuenta de que estaba embarazada.
Así lo relata la nuera de la actriz en una entrevista para Daily Mail. Al parecer, la familia estaba esperando a la muerte de todos los implicados director para dar a conocer los hechos. Loretta Young decidió en su día mantener en secreto todos los hechos. La actriz optaría incluso por ocultar su embarazo y presentar a su hija como fruto de una adopción. De hecho, le daría el apellido de su siguiente marido. Así trataría de preservar su carrera una mujer que lograría el Oscar en 1947 gracias a “Un Destino de Mujer”.
“Hermosa, de ojos azules, rubia, nacida a las 8:15 de esta mañana”, rezaba el telegrama que Young le envió a Gable el día en el que nació la niña. El actor nunca respondió ni reconoció la paternidad de la pequeña Judy Lewis.