El momento está cada vez más cerca. Una de las cintas más anheladas por todos desde hace años es la adaptación cinematográfica de Metal Gear Solid. Un videojuego glorioso que llevaba tiempo pidiendo película de acción real. De hecho, la cosa llevaba congelada bastante tiempo. Muchas especulaciones y deseos, pero poco más. Una espera que llega ya a su fin.
Jordan Vogt-Roberts (Kong: Isla calavera) se ponía al frente de la película, ofreciéndonos ciertas novedades de vez en cuando. De hecho, en 2017 comenzaba el desarrollo de un guion ya finalizado. Así, todos esperábamos el arranque oficial del rodaje y, sobre todo, el nombre del actor elegido para meterse en la piel del ilustre Solid Snake.
Ahora, con Oscar Isaac ya confirmado para el papel, toca construir una película a la altura de lo que el videojuego merece. Un difícil camino sobre el que el propio director acaba de adelantar varios detalles.
“Hay que convertir la experiencia activa de jugar un juego en la experiencia pasiva de ver una película. Para ello hemos creado un nuevo tipo de acción en la pantalla que también se base en la tranquilidad del sigilo”. La verdad es que cuesta imaginar la fórmula de la que habla Jordan Vogt-Roberts, pero lo que está claro es que si quiere estar a la altura con la adaptación del videojuego, lo que hacer explotar todo y las grandes dosis de adrenalina no son el camino. Además, ya se especula con la posibilidad de que la cinta se estrene a finales de 2024. Queremos una Metal Gear Solid a tono con el videojuego.