Muchos los han olvidado, pero lo cierto es que esta pandilla de agentes nos lo hicieron pasar en grande. Allá por 1984, la disparatada Loca academia de policía se presentaba ante el gran público para convertirse en una de las grandes comedias de la década. Pese a las sucesivas secuelas, el alocado grupo nunca perdía la esencia de un humor que todavía logra arrancarnos alguna carcajada.
Más de 35 años han pasado desde entonces, pero el grupo de cadetes (y posteriores policías) sigue despertando la nostalgia de millones de cinéfilos. De hecho, no hemos podido resistirnos a recordar hoy a uno de sus más emblemáticos personajes. Mucho ojo con Michael Winslow y su talento imperecedero. El agente Larvell Jones que nos hacía flipar con sus 1.000 ruidos. Aquí os dejamos una pequeña recopilación de sus mejores momentos.