Las cosas han quedado lejos de resultar como se esperaban. Tras incontables retrasos y una expectación desmedida, Flash llegaba a las salas de cine de todo el mundo con la intención de hacer saltar la banca. Argumentos no le faltaban a la que, para muchos, era uno de los proyectos más atractivos del universo cinematográfico DC. Una película que, desgraciadamente, ha quedado muy lejos de cumplir las expectativas.
Uno de los superhéroes más famosos de las viñetas al fin tenía su película en solitario con el rostro de Ezra Miller. Además, elementos como el regreso de Michael Keaton y su Batman parecían ser elementos suficientes como para dar el pelotazo en taquilla. Con lo que no contaba en la cinta era con quedarse tan lejos de lo previsto. 55 millones de dólares en Estados Unidos y 75 en el resto del mundo. Un botín realmente escaso para una descomunal superproducción.
De esta forma, con un total mundial acumulado de 130 millones de dólares, Flash dispara la preocupación en el seno de DC. O mucho cambian las cosas en las próximas semanas (no parece), o la película quedará lejos de ser rentable.