Parecía que estábamos ante uno de los grandes pelotazos del año. Durante mucho tiempo habíamos esperado el aterrizaje en taquilla de Indiana Jones y el Dial del Destino. La quinta y última entrega de las aventuras del famoso arqueólogo había despertado grandes expectativas. Y lo cierto es que la despedida del personaje de Harrison Ford ha sido más que interesante, pero la realidad es que el gran público no ha acudido a la llamada de la famosa sintonía de John Williams.
Indiana Jones y el Dial del Destino ya se ha confirmado como una enorme decepción en taquilla. Después de dos semanas en los cines de todo el mundo, la película dirigida por James Mangold ni alcanza los 250 millones de dólares en todo el mundo. Una cifra bastante floja para un filme que invertía 300 millones solo en la producción. Un pastizal al que se sumaban 120 en cuestiones de promoción.
Está claro que Indiana Jones y el Dial del Destino ha servido para ofrecer un adiós digno al personaje y dejar atrás la terrible cuarta entrega. Lástima que los espectadores hayan perdido ya su interés en el viejo Indi.