Es la suya una de las historias más entrañables de las que más conocido en los últimos años. Cuando el actor Miguel Ángel Muñoz llegaba a la final del programa de TVE1 MásterChef, conocíamos a la Tata. Luisa Cantero (ese era su nombre real), se ganaban los corazones de todo el mundo por su particular relación con un muchacho al que había cuidado desde niño, al que adoraba y que a su vez sentía devoción por ella.
Pero la popularidad de la ambos se disparaba durante el confinamiento. Miguel Ángel Muñoz se instalaba con la Tata para cuidar de ella en unos momentos francamente complicados. Empezaba entonces un divertido juego de ambos que iban retransmitiendo vía redes sociales y que terminaba convertido en un fenómeno genial. Un proceso recogido después en el documental 100 días con la Tata.
Pues bien, consumo pesar Miguel Ángel Muñoz anunciaba la muerte de su querida Tata a los 98 años de edad. Una despedida sentida que compartía con todos sus seguidores en forma de unas hermosas palabras hacia su tía bisabuela.
“No puedo escribir aquí nada más que no te haya expresado a lo largo de los 40 privilegiados años que podido vivir a tu lado. Esto me hace muy feliz, porque es importante poder expresar en vida el amor hacia nuestros seres queridos.
No sé si algún día llegaré a entender el vínculo tan especial que hemos tenido convirtiéndose en la historia de AMOR más especial que habré vivido nunca. Te doy las gracias por cuidarme tanto y tan bien. Por trasmitirme unos valores tan importantes y sobre todo por enseñarme a amar de de una manera tan profunda como lo hemos hecho ambos durante todos estos años.
Despedirme de ti no ha sido fácil, llevo preparándome más de 10 años y hasta que no pasamos esos más de 100 días juntos durante la pandemia no sentí de verdad que estaba preparado para dejarte marchar. Siento si he sido un algo egoísta no pudiendo soltarte antes y te agradezco tu esfuerzo incansable para no despedirte hasta que no estuviera preparado como este último tiempo”. Muy triste.