20 años si Katharine Hepburn: Sus frases más inolvidables

“Tienes que mirarla, tienes que escucharla, no hay forma de escapar de ella. Pero no es solo por su belleza, sino por su estilo”. Estas palabras eran pronunciadas en su día por Cary Grant al referirse a Katharine Hepburn. Esa chica liberal y moderna nacida en Connecticut en 1907 tardaría poco en convertirse en la mejor actriz de la historia del cine. Con decenas de películas inolvidables a sus espaldas y centenares de premios (incluidos cuatro Oscars), la figura de Hepburn era algo mucho más trascendente que su vertiente cinematográfica.

Famosa por su franqueza, su arrogancia y por su personalidad arrolladora, la actriz que vistió pantalones antes que ninguna otra mujer es hoy considerada como una de las figuras intelectuales más importantes del siglo XX. Reticente a la maquinaria hollywoodiense, Katharine Hepburn siempre vivió a su modo, si que nadie le dijese lo que debía hacer. Solo una vez acudió en una ocasión a la ceremonia de los Oscar. Lo hizo para homenajear a su amigo Irving G. Thalberg y se presentó en la gala con un pijama. Así era ella. Así era la gran Katharine Hepburn. Hace ya 20 años que nos dejó y este es nuestro pequeño homenaje con sus mejores frases.

“La vejez llega inesperadamente. De pronto ya no saltas de la silla: te levantas, que es una acción distinta.”

 

“Actuar es el menor de los talentos. No olvides nunca que no te darán un Nobel por ello y que Shirley Temple lo hacía perfectamente con cuatro años”

 

“Ser madre y ama de casa es el trabajo más grande del mundo, pero si no te interesa, no lo hagas. Yo habría sido una madre terrible.”

 

“No creo en el matrimonio. Amar, honrar y obedecer es muy poco práctico. Si lo fuera, no tendrías que firmar un contrato”

 

“Me arrepiento de muchas cosas y estoy segura que todo el mundo lo hace. Si tienes sentido común, te arrepientes de las cosas estúpidas que has hecho y si no lo haces, quizás sea porque eres estúpido”

 

“Si te dan a escoger entre dinero y atractivo, coge el dinero. Cuando envejezcas, el dinero será tu atractivo”

 

“Primero, proporcionaos placer a vosotros mismos, porque esta es la única manera de que estéis seguros de que al menos alguien está satisfecho.”

 

“Si desea sacrificar la admiración de muchos hombres por las críticas de uno, contraiga matrimonio.”

 

“Nos enseñan que debemos culpar a nuestros padres, hermanos, a la escuela, a los maestros pero nunca a nosotros. La culpa nunca es nuestra. Pero siempre es culpa nuestra, porque si queremos cambiar debemos hacer el esfuerzo.”

“La muerte sería un gran alivio. No más entrevistas.”

 

“Los enemigos son tan estimulantes…”