Mark Hamill: Cuando has estado buscando el Jedi que llevas dentro y has conseguido devolver el equilibrio a la fuerza durante tres películas, lo normal es que no puedas ya nunca quitarte esa imagen. El peso de ser Luke Skywalker y convertirse en el héroe de millones de personas en todo el planeta es lo que tiene. A pesar de continuar sus apariciones cinematográficas estos últimos treinta años, la carrera de Hamill nunca fue capaz de quitarse de encima la imagen de joven Jedi al protagonizar el mayor éxito de la historia del cine en lo que a fenómeno fan se refiere. Un actorazo, pero que siempre será Luke.
Orlando Bloom: El descomunal éxito de la trilogía de “El Señor de los Anillos” supondría todo un impulso a las carreras de sus numerosos protagonistas. Bueno, para casi todos. Tras la trilogía de “La Tierra Media”, el famoso Legolas se enrolaría con Jack Sparrow y compañía en la trilogía de “Piratas del Caribe”, pero el proyecto de estrella se quedaría allí. Johnny Depp y Keira Knightley se llevaban el protagonismo de la nueva trilogía mientras la gente señalaba a Bloom y decía “mira al Legolas…”. Siete años han pasado desde entonces y el actor solo ha tenido sus pequeños momentos en las últimas entregas de “El Hobbit”. Carnival Raw es su intento televisivo, pero la melena rubia de Légolas es alargada…
Haley Joel Osment: Un caso similar al de Linda Blair. Este se llamaba Cole Sea, pero su nombre de guerra siempre será “el niño de El Sexto Sentido”. El jovencito se llevaba incluso una nominación al Oscar gracias a su papel en la exitosa ópera prima de Mike N. Shyamalan. Osment alcanzaría cierta fama siendo todavía un niño gracias a papeles como el de “Cadena de Favores” o el de la cinta de Steven Spielberg, “Inteligencia Artificial”. Tras varios problemas con drogas y alcohol, el joven trata de reconducir sin éxito una carrera marcada por su mítico “en ocasiones veo muertos”.
(Parte I)