Han tendido el mundo en sus manos durante muchos años, pero la vida se les ha empezado a poner de nones. Desde hace tiempo, el reinado de Telecinco en la televisión española se ha ido al garete. Que la cadena entraba en una serie crisis de identidad al quedar claro que su formato de negocio ya no calaba entre el gran público. Algo que quedaba definitivamente claro con la caída de su programa estrella: Sálvame.
Ahora, en la búsqueda de un nuevo camino, Telecinco decidía volver a apostar por Jorge Javier Vázquez para conducir un nuevo espacio diario en el access a prime time. Cuentos chinos en el título de un formato nacido para luchar contra la dictadura de Pablo Motos y El Hormiguero en Antena 3. Que las cosas no han salido como se esperaba.
La audiencia ha sido un auténtico desastre. Con un 9,4% de share y un 1.240.000 espectadores de media, los datos de Cuentos chinos no podían ser más flojos. Jorge Javier ha dejado de ser ese sinónimo de éxito y a Telecinco no le sale una a derechas. Por contra, El Hormiguero volvía a liderar la franja horaria con holgura gracias a 2.488.000 espectadores de media, lo que se traducía en un 19,1% de la cuota de audiencia.
El primer asalto entre Cuentos chinos y El Hormiguero se saldaba entonces Motos doblando a Jorge Javier. Al emblemático presentador de Sálvame solo le queda remar duro a contracorriente durante las próximas semanas si no quiere que su programa muera casi antes de haber nacido. Problemas en el paraíso.