Hasta el aterrizaje de The Marvels tenía el discutible honor de ser el mayor fracaso del universo cinematográfico de Marvel. Allá por el año 2008, los cines de todo el mundo daban la bienvenida a una nueva película centrada en Bruce Banner. Tras la fallida cinta protagonizada por Eric Bana era el momento de apostar por una cinta más ambiciosa de Hulk. Además, sería la versión del famoso superhéroe que se integraría dentro del entonces incipiente universo cinematográfico de Marvel.
El increíble Hulk no era un desastre creativo, pero sí quedaba lejos de cumplir las expectativas. Fueron días realmente complicados y siempre tuvimos claro que algo no había funcionado en el seno de la producción. Por suerte, el director Louis Leterrier al fin ha querido arrojar un poco de luz sobre todo el asunto.
En palabras al podcast Happy Sad Confused (vía Variety), el director de El Increíble Hulk explicaba los enormes problemas que se fueron generando entre Edward Norton y Marvel. Parece ser que el actor quería un tono mucho más oscuro para la película y la compañía apostaba por algo más desenfadado. Comenzaban así pulsos que volvían todo realmente tenso. Algo que hoy ve distinto: “Puede que Edward tuviese razón al defender la seriedad de la cinta. Hay que recordar que por aquellos días El Caballero Oscuro tuvo un gran impacto en las cine de superhéroes”.
Pero lo que realmente tensaría la filmación sería la relación entre Louis Leterrier y Edward Norton con el tristemente desaparecido William Hurt. Las hostilidades eran constantes con el ganador del Oscar, encargado de dar vida en la cinta a Thaddeus Ross. Así, bastante bien salió El increíble Hulk para el panorama que tenían en rodaje.