Puede ser una de las peores películas del año. Somos gente de mucha fe en el cine de Zack Snyder. El director es de esos tipos que, de una forma u otra, siempre consigan seducirnos. Su cine sin complejos amigos y su apuesta por el espectáculo acaba traduciéndose en películas casi de culto. Pero la verdad es que esta vez le ha salido un desastre en toda regla.
Han sido dos décadas desarrollando su particular Star Wars. Bajo el título de Rebel Moon se estrenaba el pasado viernes una película que Zack Snyder empezó alumbrando como una nueva entrega para la saga de George Lucas, pero que fue rechazada. Así, el director le daba un lavado de cara a su historia para poder hacer la realidad al margen de Star Wars. Pero el resultado ha sido un horror.
Rebel Moon lanzaba su primera parte, bajo el título de La niña de fuego. Pero el metraje total de la historia, de más de cuatro horas, llevaba a Netflix a tomar la decisión de estrenar Rebel Moon en dos entregas. La segunda de ellas se plantará en la parrilla de la plataforma el próximo mes de abril. Pero la cosa le ha salido por un pico a Netflix, ya que la inversión se iba hasta los 170 millones de dólares en total. Una cifra a la que hay que sumar otros 80 millones en concepto de marketing.
Visto lo visto, esperemos que Rebel Moon le aporta unos cuantos millones de visualizaciones a Netflix a pesar de su discutible calidad. De lo contrario, el negocio le resultará desastroso a la compañía.