Como ocurre cada año, las nominaciones a los Oscar siempre dejan a algún damnificado. Nunca llueve a gusto de todos, pero esta vez la polémica es particularmente intensa. ¿La razón? Pues dos ausencias en las candidaturas que han provocado una auténtica tormenta en redes. Ambas relacionadas con Barbie.
A pesar de contar con 8 nominaciones a los Oscar, en la película dejaba a Greta Gerwig fuera de la candidatura a Mejor Dirección. Tres cuartos de lo mismo ocurría con Margot Robbie, que tampoco lograba la nominación a Mejor Actriz. Empezaba así una una auténtica tormenta que parece no tener fin. No ha gustado que Ryan Gosling sí haya logrado una aspiración y ellas no. De hecho, el principal argumento ha sido el de que el mensaje de la película de Barbie era cierto. Un razonamiento oportunista. El mensaje de Barbie era cierto por muchas razones, pero pocas ligadas a las candidaturas a los Oscar.
La realidad es que, a pesar de ser una película genial y a su rango de fenómeno, Barbie queda lejos de ser una de las 10 mejores películas del año. Aún así, se ha colado en la categoría de Mejor Película y en otras muchas. De ahí a querer que Greta Gerwig alcance la nominación con la que es la peor película de su carrera, con diferencia, hay un trecho. La responsable de las descomunales Lady Bird (película que le valía la nominación al Oscar) o Mujercitas no tenía hueco en Mejor Dirección. Solo hay espacio para 5. Pensemos, por ejemplo, que un director con un puñado de grandes películas, como es Christopher Nolan, logra este año su segunda candidatura a Mejor Dirección por Oppenheimer, tras la lograda por Dunkerque. Tres cuartos de lo mismo ocurre con otro tipo como Yorgos Lanthimos. Su impresionante filmografía solo le había servido para una nominación por La favorita, hasta Pobres Criaturas.
En el apartado interpretativo se ha obviado por completo que la actriz America Ferrera ha alcanzado la nominación a Mejor Actriz de Reparto por Barbie, haciendo como si no hubiese horizonte más allá de Margot Robbie. A nuestra queridísima Margot sí se le dejó sin su justa candidatura hace un año con Babylon.
En definitiva, dejando a un lado nuestros gustos y la visceralidad con la que amamos Barbie (junto a todo lo que representa), toca ya aceptar que sus 8 candidaturas a los Oscar son premio más que suficiente.