David es un gnomo de los bosques que gracias a sus conocimientos de las plantas medicinales cura a los gnomos de sus enfermedades, y a los animales heridos. Por ello, David es llamado desde todas las partes del mundo para resolver casos médicos difíciles. Hasta los gnomos reyes solicitan su consejo. Durante sus viajes, David y sus colaboradores y amigos tienen que lidiar con peligros y dificultades como trolls, monstruos, incendios, inundaciones, sequías, frío, calor… y, a veces incluso, los seres humanos. Aventuras inolvidables las de David.
Pese a que pudiera parecer lo contrario, David el Gnomo no tenía más que 26 episodios. Plagada de valores encomiables, momentos trepidantes y una sensibilidad desmedida, pocas ficciones animadas pueden compararse a esta maravilla lanzada en 1985. Una serie con un final realmente emotivo, triste y con las dosis de sabiduría distintivas.
Cuando cumplen los 400 años de edad, los gnomos se convierten en árboles y así continúan eternamente unidos a la tierra. Un dibujo hermoso de la muerte, pero que todavía nos pone la piel de gallina. El momento en el que David y su esposa Lisa se despiden del zorro Swift siempre nos dejará noqueados.