Esto del cine no es una ciencia exacta. Cuando se diseña un proyecto, nunca se sabe si terminará convertido en un gran éxito o en un fracaso estrepitoso. Eso sí, hay veces que parece bastante evidente que será la opción B. Sorprende que, algunas veces, grandes compañías decidan darle luz verde al estreno de auténticos desastres. Algo que ocurría de forma particularmente clara con Max Steel.
Si la serie de acción en la que se basaba ya era regulinchi, pues la película resultaba un horror de proporciones épicas. Era el año 2017 y lo que nos encontrábamos era con una cinta que trataba de aprovechar el tirón del cine de superhéroes, pero que no tenía absolutamente nada que salvar. Max McGrath es un adolescente que descubre que puede generar la energía más poderosa del universo, pero que para contenerla y dominarla necesita unirse a Steel, un misterioso ser extraterrestre. Gracias a sus poderes podrá defender al mundo de todos los villanos que lo acechan. Sobre el papel podría parecer que la película tenía interés alguno. Nada más lejos de la realidad. Simple, absurda e intrascendente. Terrible.
Uno de los grandes hitos logrados por Max Steel era el de firmar la peor nota de Rotten Tomatoes. En la plataforma que recopila las opiniones de la distinta prensa especializada, el filme conseguía un 0% de valoraciones positivas. Ahí es nada… Otra conquista terrible para una cinta que terminaba su andadura en los cines allá por 2016 con poco más de 6 millones de dólares recaudados. Hay quien habla de pérdidas cercanas a los 80 millones en Max Steel, una mancha en la carrera de intérpretes están grandes como Andy García o María Bello.