Hoy es considerado uno de los actores más importantes de la historia del cine y el gran público le adora, pero él también tuvo sus comienzos. El rostro de Tom Hanks es imprescindible para entender las últimas décadas de cine. El sensacional intérprete no tuvo un camino de rosas para lograr trabajar con los mejores directores de la industria o para ganar dos Oscar. Si no, atentos a esta maravilla de carta que le escribió a George Hill, el director de El Golpe, para que le “descubriera”.
La carta la escribía un Tom Hanks de 18 años y es una de las rarezas del cine rescatadas de la Biblioteca Margaret Herrick de la Academia de cine. A continuación te reproducimos el contenido exacto del divertidísimo documento. No te lo pierdas.
Estimado Señor Hill,
Dado que he visto su fantástica y premiada película ‘El golpe’ con Paul Newman y Robert Redford, y la he disfrutado mucho, me parece que debería “descubrirme”. Sé lo que estará pensando: “¿Quién es este chico?”, y puedo entender su recelo. No soy nadie. Nadie fuera del Instituto Skyline ha oído hablar de mí. No soy deslumbrante. No tengo el cuerpo de un dios griego, y ni siquiera me crece el bigote, pero creo que si la gente paga por ver ciertas películas… pagarán por verme a mí.
Hablemos sobre los detalles de mi descubrimiento. Podemos hacerlo al estilo de Lana Turner, yo sentado en un taburete en una cefetería, usted entra y se fija en mí y… ¡BAM! Soy una estrella.
O podemos hacerlo de esta manera. Me cuelo en su oficina un día y suplico por un trabajo. Para librarse de mí, me da un papel como suplente en su próxima película. Durante el rodaje, el protagonista se rompe la pierna en el camerino, y, porque ya va usted mal de tiempo en la producción, me da arbitrariamente su papel y… ¡BAM! Soy una estrella.
Todas las opciones me parecen bien, o podríamos hacerlo de cualquier otra forma que se le ocurra, ¡me da igual! Pero dejemos algo claro, Señor Hill, no quiero ser una de esas súper-estrellas muy conocidas con chicas pegándose a mi alrededor, solo un chico normal y corriente de Estados Unidos que es muy conocido, tiende un Porsche y llama a Robert Redford “Bob”.
Con todos mis respetos,
su amigo siempre,
Thomas J. Hanks