Se busca nuevo Bond. Después del estreno de la última cinta de Daniel Craig como James Bond, la lucha por convertirse en su sucesor ha comenzado. Nombres tan ilustres como los de Idris Elba, Tom Hiddleston, Tom Hardy o Charlize Theron están sobre la mesa.
Uno de los tipos que ha sonado con más fuerza a lo largo de los últimos años para hacerse con el papel es el bueno de Henry Cavill. El actor tiene planta de 007 y su nombre se ha ligado al personaje constantemente a lo largo de los últimos años. Sin embargo, cuando más cerca estuvo de hacerse con el papel, un curioso detalle le alejaba de James Bond. Era el año 2005 y Martin Campbell preparaba Casino Royale.
“El director me dijo que estaba un poco gordito y no le faltaba razón. No me había preparado bien físicamente. No sabía entrenar o hacer dieta. Me ayudo mucho aquello”. Efectivamente, el propio Henry Cavill confesaba a Men´s Health que su sobrepeso fue la razón por la que le descartaron para ser James Bond. El papel acabaría en manos de Daniel Craig, frustrando las aspiraciones del bueno de Cavill.