Ya ha pasado un buen tiempecito. Hace 10 años, la saga Crepúsculo ponía punto y final a su andadura después de convertirse en una auténtica mina de oro. Edward, Bella y Jacob arrasaban a lo bestia en unas películas que también nos presentaban a una joven actriz llamada Mackenzie Foy. ¿Su rol? El de Renesmee, la hija de los dos grandes protagonistas de la saga.
Mucho ha llovido desde aquellos días. Cuando terminaba de rodar Crepúsculo, la joven actriz tenía poco más de diez años, pero dejaba bien claro su sensacional talento. Un buen hacer que le servía para conseguir papeles en Expediente Warren, Interestellar o, ya de más adulta, en Black Beauty. Eso sí, la carrera de Mackenzie Foy lo terminaba nunca de volar tan alto como todos esperábamos.
Sea como fuere lo que está claro es que a día de hoy poco queda de aquella jovencita. A sus 22 años, Mackenzie Foy está así de irreconocible.