Los actores de Hollywood secundan la huelga en masa. La paralización de la industria americana promete alcanzar niveles de récord durante los próximos tiempos. En defensa de los derechos de ese 99,9% de actores que trabajan en condiciones precarias, las grandes estrellas de la industria han decidido sumarse a los paros que están poniendo patas arriba en la industria del cine. Una medida de presión que no se veía desde hace 60 años y que se vuelve particularmente virulenta al coincidir con la huelga del Sindicato de Guionistas.
Las primeras consecuencias no se han hecho esperar. Cintas como Deadpool 3 han detenido su rodaje. Gladiator 2 o la secuela de Mortal Kombat, tres cuartos de lo mismo. Misión Imposible 8 y Venom 3 también se han visto afectadas. Sorprendía incluso ver a los protagonistas de Oppenheimer abandonar la promoción del filme. Y es que, a pesar de representar una pequeña parte de todos los actores de Hollywood, en manos de las grandes estrellas está luchar por los derechos de quienes no ganan millones de dólares al año. Ellas son las que pueden colocar a los grandes estudios entre la espada y la pared.
A lo largo de los próximos días iremos asistiendo a una cascada de paralizaciones de rodajes y a los retrasos de decenas de películas o series. Hollywood está en pie de guerra contra los grandes estudios y más les vale a los productores negociar si no quieren que las pérdidas alcancen cifras descomunales.