Vale más caer en gracia que ser gracioso. El dicho nunca había sido más cierto. A veces vemos como películas francamente malas son capaces de meterse en el bolsillo a infinidad de espectadores. ¿La explicación? Pues si tenéis alguna bienvenida será, porque nosotros somos incapaces de encontrar una lógica al hecho de que una película como La Sombra del crimen pueda estar triunfando.
Thurmond Fowler (Morgan Freeman) es un sheriff al que se le asigna el caso de un asesinato en un pueblo de Mississippi. El principal sospechoso es Russ (Cole Houser), un vecino despreciado en el pueblo por haber hecho perder a mucha gente su dinero en inversiones. Sin embargo, cuando se descubre que el asesino en realidad entró en una casa equivocada, se empieza a desvelar una trama oculta.
Efectivamente, habéis leído bien. Morgan Freeman, uno de los mejores actores de la historia del cine lidera el reparto de la horrible La sombra del crimen. Lo peor es que a nadie le ha extrañado ver al ganador del Oscar firmar una película tan sumamente mala. Ya es habitual encontrarle en producciones de calidad tan discutible como esta. Eso sí, hay que decir que La sombra del crimen es particularmente mala.
¿Cómo puede ser que 90 minutos parezcan 900? Pues apostando por una trama ridícula y simple hasta lo ofensivo. Eso por no hablar de un grupo de protagonistas que parecen estar en la película solo esperando el momento de cobrar el cheque. En cualquier caso, lo cierto es que La sombra del crimen está triunfando a lo bestia en Prime Video. Ver para creer.