A día de hoy nuestro queridísimo y mortífero Depredador forma ya parte la cultura popular, pero pocos podíamos imaginar lo cerca que estuvo de tener un aspecto de lo más cutre y de ser interpretado por un famoso actor. Lo cierto es que el título original iba a ser “Hunter”, y el actor que habría de enfrentarse al bueno de Arnold Schwarzenegger no era otro que un por entonces desconocido Jean-Claude Van Damme.
Recién llegado de su Bélgica natal y ansioso por demostrar 
sus habilidades en el campo de las artes marciales, Van Damme aceptó meterse en el traje de lo que debía ser la terrorífica criatura llegada del espacio, pero que con sus patas largas y su cabeza de chucho más bien parecía una mantis gigante. Dado que las exigencias de su interpretación se reducían a dar saltos de un lado para otro sin tan siquiera mostrar su cara, el actor acabó por abandonar el papel después de varias pruebas. La decisión de abandonar Depredador acabaría por convertirse en una de esas carambolas del destino, ya que Van Damme aceptaría un papel en Contacto Sangriento que le lanzaría a la fama, mientras que los creativos y encargados de efectos visuales de Depredador decidieron darle otra vuelta de tuerca a la apariencia del personaje, que supondría la creación del mítico Depredador tal y como hoy lo conocemos.
A continuación os dejamos un vídeo en el que se pueden ver algunas de esas pruebas hechas por el actor, así como las fotografías de aquel infame diseño original de la criatura.
