La resaca de los Globos de Oro todavía dura. Dejando a un lado eso de que Oppenheimer pusiese patas arriba la carrera por el Oscar, lo cierto es que la entrega de los Globos de Oro nos deja cada año un montón de grandes imágenes para el recuerdo. Y es que en pocos eventos se puede ver a las grandes estrellas de la industria tan relajadas. Algo que se suele traducir en momentazos. Eso sí, ninguno como el que ha hecho las delicias de millones de fans de Star Wars.
Uno de los asistentes a la gala era nuestro queridísimo Mark Hamill. El eterno Luke Skywalker acaparaba miradas en una noche en la que Natalie Portman aspiraba al Globo de Oro a Mejor actriz protagonista en drama por su sensacional trabajo en Secretos de un escándalo. ¿Qué significa esto? Pues que otra de las grandes estrellas de Star Wars estaba en el evento, ya que Portman interpretaba a la Princesa Amidala en la segunda trilogía intergaláctica (primera a nivel cronológico).
Nunca habían coincidido bajo el mismo techo. Mark Hamill y Natalie Portman decidían hacerse una foto juntos, lo que resultaba de lo más curioso. Y es que hay que tener en cuenta que Amidala era la madre de Luke y Leia. De este modo, el inolvidable Jedi se inmortalizaba en una instantánea junto a su madre en la ficción. Una imagen que no ha dejado de dar la vuelta al mundo desde el final de la gala de los Globos de Oro. Este encuentro no está pagado.