Parece que los mejores días quedaron atrás. La saga Fast & Furious pasaba de caer en el olvido a ir remontando poco a poco en calidad y taquilla. Así hasta llegar a una séptima entrega memorable. Una de las películas más taquilleras de la historia del cine y una auténtica joya del cine de acción. Un filme que suponía además el adiós del tristemente desaparecido Paul Walker. La cresta de una saga que iba perdiendo fuelle desde entonces.
El pasado 2023 veía la luz Fast X, una película que contaba con un presupuesto realmente desmesurado. La friolera de 340 millones era lo que se invertía en la producción de la película. A ello se añadían casi 150 millones más en concepto de marketing para una cinta que se iba a un coste final de casi 500 millones. sin embargo, Fast X se llevaba a palos por todas partes de la mano de la prensa especializada. Los 700 millones de dólares logrados en las taquillas de todo el mundo resultaban un botín demasiado escaso para semejante esfuerzo económico.
Así las cosas, los responsables de la saga han decidido levantar el pie del acelerador. El presupuesto aprobado para Fast & Furious 11 es de 200 millones de dólares, una cifra sustancialmente inferior a la del anterior entrega. La intención no es otra que dejar a un lado el espectáculo ya surrealista que nos estaban ofreciendo las últimas películas, para volver al espíritu del filme original. Mucho más callejera será la despedida de un Dom Toretto que dirá adiós para siempre a Fast & Furious. Esperemos que sea un cierre digno para una de las sagas más importantes de la historia del cine de acción.