Definitivamente las cosas han cambiado mucho. Que en Marvel han perdido gran parte de su conexión con el gran público es un hecho. Ya no es solo que todos nos estemos cansando un poquito del cine de superhéroes. También ocurre que la calidad se ha resentido. Parece que van en piloto automático, lo que está alejando a los espectadores de las taquillas. Algo de lo que ya se habían dado cuenta en el seno de la Casa de las Ideas. Eso sí, hay momentos que sirven como auténtica epifanía y las nominaciones a los Razzie han sido como tocar fondo.
Por primera vez, los galardones a lo peor del año cinematográfico han tenido menciones a Marvel. Ant-Man y la Avispa: Quantumania era la película que lograba semejante hito. Después de 16 años, los Razzie volvían su mirada hacia Marvel, y no lo hacían precisamente con una única candidatura, ya que los “premios” han sido inclementes con la tercera película en solitario de la saga monográfica de Ant-Man.
Peor Actor de Reparto (Bill Murray y Michael Douglas), Peor Director y Peor Precuela, Remake, Imitación o Secuela. Ahí es nada. Ant-Man y la Avispa: Quantumania resultaba una de las grandes decepciones de los fans del cine de superhéroes, al tiempo que se llevaba palos por doquier. De hecho, el resultado de la película era una de las razones por las que en Marvel decidían pararse a meditar sus planes de cara al futuro. Ahora, las nominaciones a los Razzie podrían ser un punto de inflexión o la confirmación definitiva de que ha empezado la decadencia. Veremos.