Está claro que el mundo de la delincuencia y el crimen alrededor de las drogas tiene bastante tirón en el mundo televisivo. Series como Narcos marcaban un camino de éxito, continuado por varias ficciones que hundían su base en la realidad. Eso sí, pocas que hayan funcionado también como Griselda, la serie que se ha convertido en el nuevo fenómeno de Netflix.
Griselda nos acerca a la vida real de la ambiciosa empresaria colombiana Griselda Blanco, la creadora de uno de los cárteles de la droga más rentables de la historia. Madre de tres hijos, en el Miami de los años 70-80 la letal mezcla de encanto e insospechada crueldad la ayudó a desenvolverse con pericia entre la familia y los negocios, lo que la llevó a ser muy conocida como la ‘Viuda Negra’ o ‘la Madrina de la Cocaína’.
Con ese punto de partida, Griselda ha conseguido ya seducir a los espectadores de medio mundo, al tiempo que cabreaba a los herederos de Griselda Blanco. En cualquier caso, la realidad es que la serie protagonizada por la genial Sofía Vergara funciona a las mil maravillas. Con una protagonista en constante evolución hasta convertirse en auténtica reina del crimen, las dosis de tensión habituales del género y un ritmo endiablado, puede que Griselda falle en algunos aspectos y que no llegue a exprimir al máximo la historia que tiene entre manos, pero lo que no se puede negar es que nos atrae como polillas a la luz. Una serie con una asombrosa facilidad para enganchar, que tiene en Sofía Vergara a su gran atractivo. Otro éxito de la factoría Netflix.