– Adrien Brody: El actor sabía que su papel en “El Pianista” era una de las grandes oportunidades de su carrera. Para prepararlo, además de adelgazar 15 kilos, Brody llevaría a cabo un trabajo asombroso. Además de aprender a tocar el piano, el bueno de Adrian vendió su coche y se aisló durante meses. Hasta tal punto llevó su falta de contacto, que su novia abandonaría al intérprete ante la imposibilidad de soportar la situación. A cambio, Brody se llevaría el Oscar.
– Halle Berry: Muchos descubrieron el talento de Halle Berry en su asombroso papel para “Monster´s Ball”, pero lo cierto es que la actriz llevaba mucho tiempo luchando por convertirse en una de las grandes de la industria. Hasta tal punto llevó su empeño, que para el papel de drogadicta en “Fiebre Salvaje” la actual sex symbol optaría por pasarse tres semanas sin ducharse. Un sacrificio para ella y el resto del equipo.
– Robert de Niro: Sin lugar a dudas, de Niro es uno de los más grandes actores de la historia del cine. Cada una de sus interpretaciones es claro ejemplo de que la perfección interpretativa puede lograrse. El problema es que, para ello, no es suficiente con grandes dosis de talento. El esfuerzo resulta también imprescindible. Tanto es así, que en la búsqueda de una imagen más adecuada para su papel de “El Cabo del miedo”, el actor pagó de su bolsillo 50.000 dólares a un dentista para que le diese mal aspecto a su dentadura. Luego se gastó otros 20.000 en arreglársela.
– Charlize Theron: Nunca la madrastra de Blancanieves lució tan bien como cuando Charlize Theron le presto su rostro, su cuerpo y su talento. Tanta sería la intensidad que la actriz quiso imprimir a su personaje para “Blancanieves y la leyenda del cazador”, que en una secuencia acabaría por los suelos. Por salvaje que parezca, la actriz quiso emitir un grito tan fuerte que acabaría por desgarrarse un músculo del estómago.
