“Para mantenerme caliente, un miembro del equipo me llevaba agua templada, pero se equivocó en una ocasión y me echó agua hirviendo por encima. Empecé a hiperventilar, gritar y salté de nuevo al río, porque era un río hipotérmico y llevábamos puestos trajes de neopreno, que fue la peor parte. Este pobre hombre, para ser honestos, estuvo corriendo durante 13 horas colina arriba para hervir agua, rellenar la mitad de una enorme botella, correr hacia abajo para poner agua del río y luego dármela para mantenerme caliente todo el día”.
Así de sincero se ha mostraba Channing Tatum al hablar de su accidente más complicado en un rodaje. Y es que el próximo protagonista de Gambito se enfrentaba a una de esas situaciones tan embarazosas, como dolorosas. El rodaje al que se refería el intérprete no es otro que el de “La Legión del Águila”, cinta que protagonizó con Jamie Bell allá por 2011.
“Como cuando te quemas el dedo y sigue quemando, me estuvo doliendo durante los siguientes 20 o 30 minutos. Estaba teniendo un ataque de pánico”. Inmediatamente después, el actor fue trasladado a una ambulancia, donde recibió ayuda médica: “No tenía piel en el pene. Extrañamente no cicatrizó. Eso de ahí abajo es resistente. Se curó bastante rápido. […] Estaba como ‘¿Por qué, Dios? ¿Por qué me haces esto?'”.