21. La puntería para las noticias: Si un personaje enciende la tele, siempre ponen algo que le afecta directamente.
22. Los bebés limpios: Cuando un bebé nace en la gran pantalla, va directo a los brazos de su madre limpito y más bonico que un San Luis.
23. Los villanos y sus planes: Los villanos son incapaces de matar rápido al protagonista. están tan orgullosos de sus planes, que tienen que contárselos. Momento ideal para huir.
24. Los viejos caserones no son un chollo: Si alguien te vende un viejo caserón a precio de saldo, está embrujada como mínimo.
25. Las chicas y los descampados: si una jovencita tiene que volver a a casa por la noche, siempre elige la ruta de los túneles o los descampados.
26. La maldición del latino: Superada la frase de matar al negro del grupo, el que tiene su muerte garantizada ahora es el latino.
27. El policía escéptico: Da igual lo que le cuentes a un policía al principio de la película, porque no se lo va a creer.
28. Los esbirros siempre atacan de uno en uno: Regla de cortesía de los esbirros del villano principal es la de rodearte entre veinte, pero atacarte de uno en uno.
29. La frase autoinculpatoria: Si la has liado parda y te da el alto un policía, la pregunta de “¿Ocurra algo, agente?” es como autoinculparse,
30. La llegada tardía de la policía: Cuando acabas de matar al psicópata que llevaba persiguiéndote toda la película, es el momento ideal para que lleguen veinte coches de policía.