Pasarán años y décadas, pero Bryan Cranston siempre ocupará un lugar de honor dentro de nuestros corazones. Desde que se dejase caer por la pequeña pantalla en el primer episodio de “Breaking Bad” el pusilánime Walter White comenzaba el desarrollo más asombroso de un personaje que hemos visto en la pequeña pantalla. La transformación del profesor de química de instituto en el célebre Heisenberg lograba convertir a “Breaking Bad” en una de las ficciones más magníficas que hemos visto jamás. Desde entonces, nuestro amor por Bryan Cranston resulta indiscutible.
Le conocíamos por pequeños papeles y por ser el sensacional padre de la serie “Malcolm in the middle”, pero ahora es uno de los grandes. Bryan Cranston sabe que después de dar vida a Walter White, no hay nada que se le resista. Ganador de cuatro premios Emmy y el Globo de Oro gracias a “Breaking Bad”, el actor cuenta con las máximas distinciones en el mundo de la televisión. Al mismo tiempo, Cranston se hacía con el Tony por la obra de teatro “All the Way”. De esta forma, al sensacional intérprete solo le queda lograr el máximo reconocimiento en el mundo del cine o, lo que es lo mismo, el Oscar.
Ese momento podría estar cerca de llegar. La películas “Trumbo” sitúa al actor en todas las quinielas de cara a los Oscar. No lo tendrá fácil, ya que Michael Fassbender (“Jobs”), Leonardo DiCaprio (“The Revenant”) o Eddie Redmayne (“The Danish Girl”) serán duros competidores. en cualquier caso, su papel como Dalton Trumbo (guionista de “Espartaco” o “Vacaciones en Roma” acusado de comunista) podría llevar a las estanterías de Bryan Cranston el último premio que se le resiste.
https://youtu.be/Pi4k4cvuLAU