No vamos a descubrir nada nuevo al decir que las películas de Marvel se han convertido en el gran éxito de taquilla de los últimos años. El Universo cinematográfico entrelazado que se han sacado de la manga en la Casa de las Ideas lleva tiempo seduciendo a millones de espectadores en todo el planeta. Algo de lo que tiene buena culpa la plantilla de actores que ha logrado reunir la compañía para dar vida a sus personajes más célebres.
Seguramente, nada sería lo mismo si Iron Man no llevase el rostro de Robert Downey Jr, si Viuda Negra no tuviese la seductora mirada de Scarlett Johansson o si el escudo de Capitán América no lo sujetase Chris Evans. Pero entre todos ellos, un actor y un personaje han conseguido convertirse en los auténticos robaplanos del cine de Marvel: Tom Hiddleston y su Loki.
El dios del engaño ha logrado que muchos de nosotros vayamos con el bando del mal. El actor británico lograba seducir a propios y extraños con un villano carismático hasta el extremo. De hecho, casi simpatizamos más con él que con su honesto hermano, Thor. Por eso nos quedábamos tan decepcionados al descubrir que el personaje se había caído del montaje final de “Los Vengadores: La era de Ultron”. Ahí comenzaban a saltar las alarmas sobre la continuidad del personaje en el cine de Marvel. Una preocupación que se dispara más después de la entrevista concedida por Tom Hiddleston a Comingsoon.
“Siento decir que no tengo nada que aportar. Literalmente, nada. No sé lo que está pasando, y eso es todo. Todo está en el cerebro de Kevin Feige. Parece que el UCM no para de expandirse, y no sé cómo puede encajar Loki ahí, pero ya veremos”, afirmaba el actor al ser preguntado sobre la posibilidad de volver a meterse en la piel de Loki. ¿Es que Marvel no le guarda nada a su mejor villano?