“Eso es una estupidez. Es ridículo, ¿Por qué habría de interpretarme un niño blanco? Soy un americano negro. Soy un americano negro. Estoy orgulloso de ser un americano negro. Estoy orgulloso de mi carrera. Estoy orgulloso de lo que soy. Eso es como si tú quisieras que un oriental interpretase el papel de Oprah cuando era niña? ¡No tiene sentido!”.
Así de contundente se mostraba Michael Jackson hace unos años. El Rey del Pop se mostraba indignado en una entrevista concedida a Oprah Winfrey unos años antes de su muerte. Por aquel entonces, el rumor de un proyecto centrado en su figura era incesante. El bueno de Jackson no se imaginaba que sus palabras cobrarían mucho sentido unos cuantos años después. Del mismo modo, tampoco se planteaba que esta rotunda declaración de principios pudiese ser obviada de tal forma.
Hace unos días conocíamos la noticia de que se preparaba un telefilme sobre el viaje en coche que realizaron Liz Taylor, Marlon Brando y el propio Michael Jackson el 11 de septiembre de 2001. Ante a imposibilidad de abandonar la ciudad de Nueva York el día de los atentados, el grupo de ilustres figuras decidía tomar un coche y huir del lugar.
Hasta ese punto todo sonaba bien. De hecho, la apuesta por un perfil de comedia resultaba de lo más llamativo. El problema llegaba cuando se anunciaba que Joseph Fiennes sería el encargado de dar vida a Michael Jackson. El elección del protagonista de “Shakespeare in Love” levantaba ampollas, provocando una oleada de críticas al proyecto.
“Él estaba probablemente más cerca de mi color de piel que de su color original”, declaraba un Fiennes que no hacía más que avivar la polémica. Veremos cómo termina la cosa…
https://youtu.be/BbItFJJPPmA