Oscars, premios, grandes recaudaciones… Nada de eso nos importa. Los últimos años de la industria serán recordados por la trilogía de “Batman”, “Avatar, “Birdman”, las películas de Clint Eastwood, las de Quentin Tarantino y un largo etcétera de sensacionales trabajos. Ya sabemos que todas esas cintas son geniales, pero nuestra atención se centra hoy en un perfil de películas que no alcanzaron la repercusión que su sensacional propuesta habría merecido. Estamos ante 12 maravillas de los último años que deberían ser idolatradas.
12. Watchmen: Los que esperaban encontrarse una cinta de superhéroes al uso, acabaron por convertir “Watchmen” en un fracaso comercial. Ni grandes explosiones, ni villanos de seis cabezas, ni nada por el estilo… Ante eso, las caras de decepción al salir de la sala resultaban evidentes. Una lástima, sobre todo si tenemos en cuenta que la adaptación que Zack Snyder se marca de una de las novelas gráficas más grandes de la historia es soberbia. Puede que el problema estuviese en la forma de venderla, pero lo cierto es que cada uno de sus 163 minutos de duración es poesía visual y narrativa.
11. Prisioneros: Si un director nos ha asombrado con su arrollador talento estos últimos años, ese es Denis Villeneuve. Pese a llevar varios años demostrando su capacidad, el canadiense nos dejaba de piedra ante la inmensidad de esa obra llamada “Incendies” (2010). A nadie le sorprendió que su inmediato salto a Hollywood fuese un trabajo tan hipnótico y perturbador como la sensacional “Prisoners”. Con un glorioso reparto comandado por Hugh Jackman y Jake Gyllenhaal, el filme nos adentra en una oscura historia sin ningún tipo de concesiones a la galería. El thriller se convertía en una de las propuestas más brutales de los últimos tiempos y Villeneuve, en un auténtico maestro del la creación de atmósferas embriagadoras.
10. Shame: La coartada de la que se sirve el director Steve McQueen es la adicción al sexo de su protagonista. Es el pretexto ideal para deconstruir a su personaje en su descenso a los infiernos. La lucha interior de un hombre incapaz de encontrar la paz interior y la satisfacción mostrada en planos largos, en carreras eternas y en miradas perdidas hacen de “Shame” una de las cintas más perturbadoras que ha dado la industria en mucho tiempo. Pese a su estilo poco digerible para las masas, la cinta tendía sus redes sobre aquellos que se atrevían a enfrentar sus propios miedos, convirtiéndose al instante en cinta de culto. Buena parte de que “Shame” sea tan extremadamente brillante la tiene su protagonista, Michael Fassbender. Cuesta imaginar una interpretación más extrema y valiente que la que este alemán de nacimiento e irlandés de corazón se marca en la cinta. Un golpe al mentón.
9. Mud: Antes de que Matthew McConaughey pasase de “chulo de playa” a actor idolatrado, resulta que el intérprete ya llevaba tiempo mostrando su talento. Pese a que se perdió unos añitos en el camino, McConaughey ya era un gran actor sin el Oscar de “Dallas Buyers Club” o sin marcar tendencias con “True Detective”. La historia del fugitivo que se esconde un una isla del río Mississippi después de matar a un hombre en defensa de la mujer que ama resulta lírica y conmovedora hasta niveles inimaginables. Su encuentro con dos jóvenes que tratarán de ayudarle será un punto trascendental en la vida de unos protagonistas aterrizando en el mundo real de golpe y porrazo.
Watchmen? jajajaja os habéis leído el comic? como peli no está mal, como adaptación deja mucho que desear. Personajes y trama tergiversados desvirtuando el poderoso mensaje de Moore. No te digo del metraje que no para un segundo, no deja respirar a la película… fuerza las cosas. No hay una narrativa coherente y así podemos seguir. Lo único bueno es la ambientación. Lo técnico se le da muy bien a Snyder, lo demás…pfff. Prisioneros me gustó pero tampoco es que sea maravillosa, de ese estilo habría escogido Zodiac. De todas las que has puesto la que me parece una obra maestra es Mud.