La cosa no tenía muy buena pinta, pero nadie se esperaba semejante leche. Después de que la cinta se convirtiese en la gran decepción del pasado Festival de Cannes, la expectación alrededor de “The Sea of Trees” era bastante elevada. Se había creado un clima bastante curioso debido a que nadie quería estrenar la cinta. Así, la cinta que prometía ser uno de los grandes éxitos del año terminaba más de un año escondida en un cajón.
Un estadounidense (Matthew McConaughey) y un japonés ( Ken Watanabe) se conocen en el tristemente famoso “bosque del suicidio”, un lugar al que la gente va para quitarse la vida. Tras entablar conversación, abandonan sus proyectos de suicidio y juntos emprenden un viaje a través del bosque. Curiosa premisa a la que se añadía la sensacional Naomi Watts y un director del prestigio de Gus Van Sant (“Elephant”, “Milk).
Ante esta situación A24 decidía apostar por un estreno minoritario de cara a ir sumando salas en función del éxito, lo que no parece que vaya a ocurrir. Los 1.877 dólares recaudados durante su primer fin de semana y el 92% de malas críticas cosechado se antojan como suficiente prueba para reconocer que el “The Sea of Trees” resulta todo un desastre.