Rachel es una mujer devastada por su reciente divorcio que dedica cada mañana de camino a su trabajo a fantasear sobre la vida de una pareja aparentemente perfecta que vive en una casa por la que su tren pasa cada día. Pero una mañana Rachel es testigo desde la ventana del tren de un impactante suceso y se ve involucrada en el misterio que ella misma revela…
Efectivamente, sois muchos los que conocéis esa historia a la perfección, No en vano, hablamos del argumento de La chica del tren, una de las novelas más exitosas de los últimos años. La adaptación de la obra de Paula Hawkins llegaba a las carteleras americanas revestida de gran expectación. Emily Blunt, Rebecca Ferguson, Luke Evans y Haley Bennet se ponían al frente de una cinta que está resultando todo un éxito en taquilla, pero que se está llevando palos de la crítica por todas partes.
Si en el primer fin de semana logras recaudar los 45 millones que te costó una película, lo normal es que estés de lo más feliz. Si a eso le añadimos que La chica del tren todavía no ha sido estrenada en muchos países, las perspectivas no podrían ser mejores. Sin embargo, lo que realmente nos intriga es saber a dónde habría llegado el filme si la prensa especializada americana no le hubiese dado un 56% de valoraciones negativas. Es cierto que la división entre partidarios y detractores resulta de lo más radical, calificándose como una de esas obras que amas u odias. Por nuestra parte, esperaremos hasta el próximo 21 de octubre para posicionarnos.