Los fans de The Walking Dead andan que trinan. Uno de los fenómenos televisivos más importantes de los últimos años ha ido generando devotos con el paso del tiempo, lo que provoca que las reacciones sean especialmente pasionales ante cada detalle. La séptima temporada comenzaba con el capítulo más polémico de la historia de la serie, pero también lograba reconectar a muchos de los que habían perdido la fe. Sin embargo, la travesía vivida por episodios irrelevantes terminaba por colmar muchas paciencias, lo que encontraba su reflejo en audiencias y en comentarios en redes sociales.
Cierto es que los dos últimos capítulos antes del midseason an logrado remontar el vuelo, pero los responsables de la serie saben que no pueden andarse con muchos más juegos si no quieren terminar por espantar a la audiencia.
“Obviamente, he oído que la gente no está muy contenta, y eso me hace infeliz por todo el trabajo que hacemos por la serie. Hay una gran historia detrás y tengo una fe absoluta en Scott Gimple, el equipo de guionistas, y los productores de la ficción. Pero también diré que los siguientes ocho episodios son todo lo contrario a los anteriores capítulos”. Estas eran las palabras que Andrew Lincoln (Rick) dedicaba a los fans en declaraciones a The Wrap. Lo cierto es que nos lo creemos, ya que las últimas secuencias resultaban esperanzadoras. En todo caso, más les vale ir con pies de plomo de cara al futuro.