Ha sido un trabajo realmente interesante. Cualquier seriéfilo que haya tenido la fortuna de encontrarse con El Exorcista en su camino habrá descubierto que el espíritu de la cinta original volvía de forma brillante a la pequeña pantalla. Sin atrevernos a comparar la serie de Rupert Wyatt con el clásico de William Friedkin, conviene decir que el director de El origen del Planeta de los Simios se ha marcado un trabajo más que interesante.
El intento de nuestros dos protagonistas por poner fin a la posesión demoniaca que sufre una familia se saldaba con una primera tanda de episodios que, sin llegar a golpearnos en el mentón, si que conseguía causarnos más de un escalofrío. De hecho, la puesta en escena era de esas que perturbaban el ánimo. Gran producto televisivo que, sin embargo, parece que se quedará sin una segunda temporada.
No hay cancelación oficial, pero las reuniones de cara a su renovación tampoco parecen fructificar. Según parece, la audiencia ha dado su veredicto y, pese al aplauso de quienes se han puesto frente al televisor, El Exorcista se quedará sin segunda temporada. Unas cifras de espectadores bastante pobres parecen condenar a una serie que prometía un futuro glorioso. Toda una pena.