Cualquier actor que se precie debe tener un buen cambio de peso para algún papel de su carrera. Es como el símbolo definitivo de tu dedicación a la profesión. Esto es algo que de lo más común dentro de la industria, pero lo que no es tan habitual es encontrarse a actores capaces de marcarse oscilaciones de peso tan brutales cada dos años.
Efectivamente, lo de Jonah Hill y la báscula es algo complejo. Tan pronto nos encontramos con el actor entradito en kilos, como de repente aparece una nueva versión desinflada del intérprete. En esta ocasión no tenemos ni idea de si se debe a cuestiones relacionadas con un papel, pero lo que si tenemos claro es que nos hemos quedado de piedra al ver a Jonah Hill saliendo del gimnasio.
Aunque pueda parecer increíble, el tipo de barba es el dos veces candidato al Oscar. Efectivamente, lo que nos encontramos es una pérdida de peso cercana a los 30 kilos que ha modificado sustancialmente la imagen de Hill vista en la reciente Juego de Armas. Asombroso.