Han sido largos años de bagaje por el desierto, pero parece que hay un futuro para el T-800. Cuando más fea se había puesto la cosa, el padre de la criatura ha entrado en escena para rescatar el legado de su mítica saga. Terminator: Génesis se convertía en un nuevo desastre en el intento de devolver al personaje de Arnold Schwarzenegger a lo más alto. De hecho, los millones de fans de la saga parecían empezar a perder la fe. De ahí que James Cameron haya decidido tomar cartas en el asunto.
Ya nadie duda de que el director de las gloriosas dos primeras entregas recuperará los derechos de la saga Terminator en 2019. James Cameron no parece dispuesto a negociar con nadie. Quiere tener en sus manos las decisiones creativas sobre la auténtica resurrección de la saga, por lo que no hay posibilidades de que el proyecto acabe en otras manos.
Dicho eso, no cabe duda de que el rumbo que adopte la película será decisión única de Cameron. Lo que no es tan seguro es que se reserve la silla de director. De hacerse realidad las informaciones que acaba de publicar Deadline, la dirección de la nueva película quedaría en manos de un Tim Miller (Deadpool) al que Cameron habría elegido personalmente.
El T-800 y John Connor vuelven a estar en buenas manos.