4. Transformers: El último caballero: Desastre absoluto. Nunca hemos buscado en la saga un Ciudadano Kane ni nada por el estilo, pero entre un mucho y un poco hay un término medio que aquí ha desaparecido por completo. Diálogos y situaciones realmente ridículas se mezclan con chatarra intergaláctica, un argumento pobrísimo y ruido atronador. Por si no fuese suficiente, el público decidía darle la espalda por primera vez a la saga, logrando la menor recaudación de las 5 entregas. Encima, larguísima.
5. Rey Arturo: La Leyenda de Excalibur: Guy Ritchie se nos quedaba corto… O largo. El sensacional director nos ofrecía su particular versión de la Leyenda de Arturo, dejándonos algún que otro momento interesante, pero que terminaba por perderse en lo excesivo del global. Precipitada constantemente, resulta difícil quitarse la sensación de que el metraje se recortó dramáticamente. Cuando sacas un elefante de 200 metros en el segundo plano, el listón queda demasiado alto.
6. La Torre Oscura: Tras años esperando el momento, la obra más grande de la literatura de Stephen King al fin llegaba a la gran pantalla. Un reparto formado por Idris Elba y Matthew McConaughey invitaba al optimismo, pero la sensación de que la cosa fallaba iba apoderándose de todos incluso antes del estreno. Finalmente, los peores augurios se confirmaban y la cinta se presentaba como una pobre y superficial visión de lo que el maestro King imaginó un día. Sobresaliente decepción para todos.