Cuesta sacar algo bueno. Seguro que muchos pensáis que somos unos exagerados al lanzar un título así. De hecho, no vamos a negar que parece una temeridad semejante afirmación en un mundo que ha visto nacer Batman & Robin, Daredevil o Cuatro Fantásticos. Sin embargo, es suficiente con ver un par de capítulos de Inhumanos para darse cuenta de que su reino no es de este mundo. Ellos juegan en otra liga inalcanzable por cualquier otro desastre del cine o las series de superhéroes. No hay nada comparable.
Pocas veces asistimos a situaciones tan excepcionales como esta. La realidad es que en la Casa de las Ideas se habían volcado con una ficción desarrollada en colaboración con la ABC y que pensaba lanzar sus dos primeros episodios en los cines y en formato IMAX. Desgraciadamente, el pase por salas Inhumanos se ha quedado lejos de lo esperado, con unos fans indignados. Ningún comentario positivo lograba una serie a la que la crítica especializada ha despedazado sin sin ningún miramiento.
Fieles a nuestra política de concederle una oportunidad a cualquier pieza audiovisual, hemos sido víctimas de nuestra buena fe. Inhumanos es torpe, caótica, cutre y extremadamente pobre en su narrativa. Absolutamente nada funciona en una serie que parece más una broma de mal gusto. Desastre de épicas proporciones que todos deberíamos intentar olvidar cuanto antes.