Ha caído la primera. En estos tiempos en los que el mundo de las series no hace más que expandirse descontroladamente, tantos son los productos que triunfan, como los cancelados de forma prematura. De hecho, la primera víctima de este 2018 es una de las apuestas más ambiciosas de los últimos años y una serie convida, en su día, para resultar un gran fenómeno. Efectivamente, hablamos de Las crónicas de Shannara.
Nunca terminó de cuajar. La adaptación de la novela de Terry Brooks se mudaba de MTV a Sipe Tv tras una primera temporada en la que los datos de audiencia no terminaron de responder. Así, su segunda vida tampoco daba el resultado previsto, a lo que se unían unos descomunales costes de producción. Estos habrían sido los factores determinantes para el final de una serie que pudo ser mítica, pero que irá al directa al cementerio de las ficciones olvidadas.
En el principio de los tiempos, nuestro planeta estaba poblado por criaturas mágicas. Los elfos usaban la magia para el bien, mientras que los que canalizaban su poder con fines destructivos se convirtieron en demonios. Cuando los demonios atacaron a los elfos con el fin de aniquilarles, estos últimos erradicaron el mal encarcelando a los demonios en el árbol mágico conocido como Ellcrys. Mientras al Ellcrys no le ocurriera nada, no había qué temer. Miles de años después, la especie humana, la ciencia y la tecnología dominaban el planeta y los elfos, ya ocultos, eran solo simples recuerdos o leyendas de cuentos de hadas. A mediados del siglo XXI, los conflictos bélicos que se multiplicaron por todo el planeta desembocaron en una guerra química y nuclear que acabó con nuestro mundo. Miles de años después de la destrucción de nuestra civilización, el planeta se encuentra dividido en las Cuatro Tierras, habitadas por seres de todo tipo: elfos, enanos, trols, gnomos, humanos… El último descendiente de la familia Shannara es el heredero de un poder mágico que una vez los hizo poderosos. Las fuerzas oscuras que habían permanecido confinadas durante siglos empiezan a liberarse: cada vez que cae una hoja del Ellcrys, el árbol mágico que se muere lentamente, un demonio escapa. Nuestros héroes son la única esperanza de detener el avance del mal.